El difícil acceso a la vivienda dispara la oferta de bajos y “gallineros”
Una persona que solo pueda pagar unos 400 euros mensuales de hipoteca a 30 años tendrá que optar, en este momento en Barcelona, por comprar un pisito de 11 metros cuadrados. La locura inmobiliaria que vive la ciudad, unida a la subida de las hipotecas, ha llevado a muchos compradores a reducir sus expectativas y, con ellas, las dimensiones de sus futuros hogares. Los bajos y pisos altos sin ascensor encabezan este robo a mano armada de hasta 25 metros cuadrados. Los precios más modestos del momento van a partir de los 82.000 euros, por 11 metros cuadrados a precio de oro.Esta dimensión es la mínima que ofrecen los principales portales inmobiliarios del país, fotocasa.es e idealista.com. El piso en cuestión, en un único ambiente con mini lavabo, está en la calle de Carretas con Sant Pau y sale a 7.455 euros el metro cuadrado. Lo gestiona una conocida inmobiliaria de la ciudad. Pero no es, proporcionalmente, el más caro. En Sants-Montjuïc, un estudio de 16 metros cuadrados cuesta más de 120.000 euros, y en Gràcia uno de 18 metros cuadrados en un único ambiente y en un quinto piso de altura a reformar por completo se vende por 135.000 Euritos de nada!!!
Esto si que es para encarcelar a alguien.
Una persona que solo pueda pagar unos 400 euros mensuales de hipoteca a 30 años tendrá que optar, en este momento en Barcelona, por comprar un pisito de 11 metros cuadrados. La locura inmobiliaria que vive la ciudad, unida a la subida de las hipotecas, ha llevado a muchos compradores a reducir sus expectativas y, con ellas, las dimensiones de sus futuros hogares. Los bajos y pisos altos sin ascensor encabezan este robo a mano armada de hasta 25 metros cuadrados. Los precios más modestos del momento van a partir de los 82.000 euros, por 11 metros cuadrados a precio de oro.Esta dimensión es la mínima que ofrecen los principales portales inmobiliarios del país, fotocasa.es e idealista.com. El piso en cuestión, en un único ambiente con mini lavabo, está en la calle de Carretas con Sant Pau y sale a 7.455 euros el metro cuadrado. Lo gestiona una conocida inmobiliaria de la ciudad. Pero no es, proporcionalmente, el más caro. En Sants-Montjuïc, un estudio de 16 metros cuadrados cuesta más de 120.000 euros, y en Gràcia uno de 18 metros cuadrados en un único ambiente y en un quinto piso de altura a reformar por completo se vende por 135.000 Euritos de nada!!!
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